La decisión del Banco de Japón afectó significativamente al dólar y a la evolución de los mercados mundiales el miércoles. Los rendimientos del JGB subieron a máximos de 8 años, el DXY cayó a mínimos de 6 meses y los metales subieron.
Después de registrar ayer la mayor subida diaria desde 1998 tras el sorprendente cambio de política del Banco de Japón, el yen entró en un periodo de corrección. El USD/JPY tocó un doble suelo en 130,50, con la resistencia cómodamente alejada en 133,60. Los índices asiáticos fluctuaron mientras los inversores digerían las implicaciones de la medida del Banco de Japón.
Como consecuencia de la sorprendente decisión del Banco de Japón, el dólar cotizó a la baja y favoreció a los precios del oro y otros metales preciosos. El Congreso avanzó en las conversaciones sobre un proyecto de ley de gastos de 1,7T$, lo que podría elevar la inflación. El oro se prepara para superar los 1825 $/oz, con la vista puesta en los 1850 $/oz netos, a menos que retroceda hacia los 1800 $/oz. Las acciones de las mineras de oro australianas se dispararon, impulsando al alza el índice ASX.
El WTI recibió apoyo después de que los Servicios Meteorológicos Nacionales pronosticaran un ciclón invernal que afectará a la mayor parte de EE.UU. en los próximos días, con condiciones meteorológicas de frío extremo hasta Navidad. Esto se produce después de que una tormenta en el noreste dejara fuertes nevadas durante el fin de semana, dejando a 200.000 clientes sin electricidad durante horas. Aun así, el crudo cotiza dentro de un estrecho margen entre 74,50 y 77 dólares la onza.
Francois Villeroy afirmó durante una entrevista de prensa que se había disipado cierta incertidumbre sobre las perspectivas de la economía compartida, lo que sugiere que evitará un aterrizaje brusco. Los mercados podrían haber interpretado esto como una postura pesimista. El EUR/USD tiene un soporte y una resistencia en 1,0580 $ y 1,0660 $, con una ruptura inminente.
Las dos principales empresas presentaron sus resultados tras el cierre del mercado, y Nike superó ampliamente las estimaciones. FedEx recortó sus previsiones, pero no a los volúmenes de entrega de paquetes, lo que ofreció cierto alivio a los inversores preocupados por la posibilidad de que las ventas minoristas se desplomen en los próximos meses. El Nasdaq y el DJIA se vieron un poco al alza